LA DISCIPLINA ESCOLAR
GARCÍA CORREA, Antonio
Universidad de Murcia.
antogaco@um.es
RESUMEN.
]La disciplina escolar constituye uno de los principales elementos del proceso enseñanza-aprendizaje a través de la cual los alumnos aprenden a comportarse como miembro de la sociedad, por lo que se presenta como una cuestión relevante tanto en los contextos educativos como familiares y sociales. Los profesores, aunque están de acuerdo en que es necesario un cierto orden en las clases, coinciden en señalar que, en muchas ocasiones, actuaciones y estrategias para mejorar la disciplina resultan inoperantes.
Desde hace décadas la indisciplina, violencia,… viene siendo un fenómeno que preocupa tanto al profesorado como a los responsables de la Administración Educativa y familia. La preocupación surge por la frecuencia con la que suceden hechos que alteran y rompen la buena armonía y convivencia en las aulas y centros educativos.
Es preciso desvincular la disciplina escolar de la disciplina en otros ámbitos y de restringirlo a sinónimo de autoritarismo. La palabra disciplina escolar no es del agrado de muchos profesores, sociólogos, psicólogos y pedagogos porque le surgiere un contenido e idea de rigidez y dominio por parte del profesorado. Nosotros aquí nos referimos simplemente al proceso de gobernar, dirigir y organizar la clase y centro de forma armónica y eficaz, y de ofrecer oportunidades adecuadas para el desarrollo de las aptitudes de cada alumno, en la que el profesor pueda cumplir su misión especial de facilitar la labor de aprendizaje, y los alumnos asimilar de buen agrado las técnicas de disciplina y orientación de sus propias conductas. En esta forma de entender la disciplina tanto el profesor como los alumnos deben ser conscientes de la conveniencia de regirse por ciertas normas y así les estamos preparando para cumplir con las normas sociales.
Indudablemente que una de las funciones de la disciplina es de socialización o sea, el aprendizaje de los estándares del comportamiento aprobados y tolerados en una cultura determinada. Psicológicamente hace referencia a la seguridad emocional del alumno pues los controles externos le dan más seguridad en sus conductas ya que su capacidad de autocontrol es limitada. Ninguna sociedad, por muy sencilla y rudimentaria que sea, puede funcionar sin normas, el cumplimiento de esas normas y el control de su cumplimento. De esta forma estamos enseñando a que los alumnos vivan las normas de clase y así le estamos preparando para vivir en la sociedad.
Existen distintos modelos alternativos para que los alumnos logren el aprendizaje de normas, orden, respeto y convivencia en el aula. Lo importante es que el profesor se interrogue cuando intenta elegir uno u otro modelo si está de acorde con su punto de vista acerca de la educación, si responde a los objetivos de aprendizaje que pretende conseguir, a las características evolutivas de los alumnos así como a las situaciones especiales de dicho aprendizaje y al proyecto educativo del centro.
Son varios los determinantes de la disciplina escolar y entre otros destacamos, los alumnos, el grupo-clase, los profesores, equipo directivo, el centro, zona, familia.
Finalizamos con un esquema de las distintas técnicas y estrategias de intervención psicopedagógicas para mantener la disciplina en las aulas y centros educativos. No podemos desarrollarlas porque nos desborda el tiempo y espacio que tenemos para presentar esta ponencia.
Fuente de información. www.um.es/agcorrea
[/justify]